Mientras comienzan las protestas por la falta de diversidad racial en la 88 edición de los Oscar, el acento hispano ha quedado confirmado en un año donde los hay incluso que confían en repetir su triunfo de hace un año. Se trata en concreto de Alejandro González Iñárritu, conocido entre los amigos como “el negro”, y Emmanuel “Chivo” Lubezki. Son el realizador y el director de fotografía, respectivamente, de The Revenant, película que encabeza este año la lista de candidaturas al Oscar, 12 en total incluidas las que honran su trabajo. No hace ni un año ambos sujetaban sendas estatuillas que reconocían sus trabajos previos en Birdman. El “chivo”, como le llaman sus amigos por esa perilla que luce, lleva incluso su baile con el Oscar algo más lejos, ganador del premio hace dos años como director de fotografía de Gravity. De volver a conseguir el galardón con su fascinante trabajo rodado con luz natural en The Revenant lograría tres estatuillas consecutivas, algo que nadie ha hecho en su categoría. Su amigo González Iñárritu, reciente ganador del Globo de Oro y nominado en los premios del Sindicato de Directores, también haría historia si gana la estatuilla, tan solo el tercer director con dos Oscar consecutivos y el primero, si se cumple, en 66 años. Un club exclusivo al que en los anales de la historia del cine solo pertenecen John Ford y Joseph Mankiewicz.
Hay más pequeñas joyas hispanas escondidas entre los candidatos al Oscar de esta edición, sus nombres eclipsados bajo el fenómeno Iñárritu. En el apartado de mejor documental se ha hecho hueco Cartel Land, una producción estadounidense sobre un tema que cruza la frontera centrando su historia en los movimientos ciudadanos armados contra los carteles de la droga. Premiado en el festival de Sundance, el documental se fija especialmente en la figura de José Manuel Mireles, conocido en Michoacán como “el doctor” y que lidera el grupo “Autodefensa” contra el cartel de los Caballeros Templarios.
La lista no estaría completa sin la presencia del español Paco Delgado que defiende su segunda candidatura al Oscar con el diseño de vestuario realizado para la película The Danish Girl. Irónicamente, entre sus rivales está el trabajo de Jacqueline West para The Revenant, cinta rodada en parte en Argentina y con alma hispana pero cuya producción es estadounidense. Parafraseando el eslogan de este año de los Oscar, todos los candidatos sueñan a partir de ahora con el oro pero este grupo además sueña en español.